EL CASO DEL MONSTRUO DE SABANA LARGA 1990


El suceso que conmocionó a la población coriana ocurrió a las 8 y 15 minutos el día sábado 22 de septiembre del 1990. Una joven de 17 años identificada como Verónica Gómez, estudiante del quinto año de bachillerato en el liceo Cecilio Acosta fue asesinada de dos disparos en manos de su propio padre Emiro Gómez.
El asesino es cabo segundo de la Policía de Cumarebo, y asesinó a su hija en momentos cuando la muchacha se encontraba en compañía de su novio en casa de su abuela.
Los Hechos
Relata la nota de prensa de la periodista Mirna Parra del diario La Mañana que el día viernes 21 de septiembre el padre de la joven Emiro Gómez habría tenido una fuerte discusión con su hija, y en un momento de rabia le saco y quemó toda la ropa para que ella no pudiese salir. Al parecer la joven se armó de valentía y fue a casa de su abuela en la calle 4 del sector Sabana Larga cosa que disgusto más al enloquecido Padre.
El día sábado 22, Emiro Gómez se presentó en la casa de la abuela, la sorpresa invadió a los presente, más aún a Verónica que conversaba con su novio Nelson Castro en la sala de la humilde vivienda.  Emiro al encontrarse con esa escena familiar donde él no estaba involucrado preso de ira sacó su arma y disparó dos veces contra la infortunada muchacha.
Familiares y amigos del sector llevaron de inmediato a Verónica al hospital general de coro a bordo de un taxi, pese a la rapidez que condujo el conductor la muchacha murió en el trayecto.
Un testigo del hecho, amigo de la estudiante y de su novio dijo que Verónica al ver a su papa se asusto y al observar las intenciones del papa de sacar el arma gritó “no papá no lo hagas”, pero Emiro Gómez padre enloquecido por la ira acciono el arma dos veces al pecho de su hija.
Emiro Gómez: Mi amor por Verónica era como la de un padre con su hija
En el retén policial, Emiro Gómez automáticamente expulsado de las FAP luego de 19 años de servicio en una rápida explicación al equipo reporteril de La Mañana, dijo que desde hace una semana sentía que tenía un problema en su casa. Una noche llegó y encontró el portón sin el “alambrito” que se ponía. Cuando entraba sintió que un tipo pegó un brinco de “adentro de la casa” seguido del grito de alerta de su hija menor:”verónica, mi papa”.
“Desde ese momento me sentí mal”. Emiro le molestaba que un muchacho entrara y saliera de su casa sin su consentimiento. Hizo desastres en momentos de ira, tiró el televisor, quemó ropa, desatando la furia  por no tener el control de su hija mayor. Emiro sostenía que fue allá para darle el permiso a Nelson Castro de visitar a Verónica, pero el final fue otro.
“Desde ese día me quedó la idea en la cabeza. No hallaba con quien desahogar mi problema. Yo hable con una evangélica, le pedí consejo, una ayuda, pero el deseo que tenia era de acabar con mi hija, y anoche cuando la vi conversar con el me atacaron los nervios” decía moviendo con rapidez y nerviosismo sus manos.
Periodista: ¿Ha tenido problemas con su hija antes por cuestiones de amores?
Emiro Gómez: Una vez le conseguí unas cartas, me puse bravo, porque eso es feo cuando le ocultan algo.
Periodista: ¿Pero porque llego a matarla, porque no converso con ella?
Emiro Gómez: No. Yo no podía hablar con ella no me paraba, y me dejaba hablando solo.
Periodista: ¿Sentía usted celos?
Emiro Gómez: Si, celos de padre.
Luego Gómez dejó de hablar.
NI PARA EL NI PARA NADIE
Haide de Gómez esposa de Emiro y madre de Verónica en su dolor explicaba a los periodistas “Yo creo que el pensó ni para mi ni para nadie”
Haide cree que su esposo estaba enamorado de su hija, muchas veces le increpó pero este le atinaba a responder que era amor de padre no lo que ella pensaba. Llorando expuso que su esposo Emiro Gómez tenía todo planificado, al preguntarse qué porque si sospechaba no sacó a Verónica de la ciudad lejos de Emiro, “Yo nunca pensé que fuera hacer lo que decía” respondió bajo una crisis de llanto.
“Yo ese día me sentía nerviosa, fui a la cocina a buscar agua, y allí fue cuando escuche los disparos, vi a mi hija Verónica con la cara volteada y a él apuntándole con la pistola”
HABLA EL NOVIO
Nelson Castro es un muchacho de 18 años que trabaja en una Miniteca. Desde hace un año cortejaba a Verónica Gómez, pero hace mes y medio decidió pedirle que fuese su novia, la cual ella “aceptó”.
Castro, ya más calmado contó al equipo de La Mañana que la noche del crimen el estaba sentado en el sofá con Verónica, y el padre estaba al frente a la derecha, Emiro les preguntaba qué iban hacer con el equipo de sonido -que en una rabieta el rompió al enterarse de su relación a escondidas con Verónica, Nelson para tratar de calmar la tensión le planteó que corrieran con los gastos los dos, momento preciso para que el sargento segundo de la Policía de Falcón Emiro Gómez sacara su arma de reglamento, un revólver calibre 38 y le disparara a Verónica. Nelson asustado pensó que los tiros eran para el, pero los tiros se los dio a ella, relataba.
La pareja tenía apenas un mes y medio de noviazgo, pero se veían de hace más de un año, Nelson recuerda que cuando Emiro se enteró de la relación, reaccionó de manera brusca y amenazó con matarlos.
Periodista: ¿Cómo era la relación de Emiro con su hija?
Nelson Castro: Prácticamente el estaba enamorado de ella, ella me lo dijo y toda la familia lo sabe. Pero no decían nada porque le temían.
Una semana tenía planificando el asesinato de su hija reveló la nota periodística de Mirna Parra para el diario La Mañana. En el entierro de Verónica Gómez comentaban lo que la mente trastocada de Emiro preparaba el momento para asesinar a su hija con el novio.
El hecho ha conmocionado a la opinión pública que ha repudiado el hecho y exigen la pena máxima para Emiro Gómez.
El cortejo fúnebre avanzaba con las canciones de la cantante Karina, música que le encantaba a Verónica.
TODO EL MUNDO SABÍA
En el ambiente de quienes acudieron al entierro solo comentaban la forma de cómo Emiro trataba a su hija, no le permitía tener amigos varones y tenía estrictos horarios para poder salir. Todos coincidían en la obsesión de Emiro por su hija Verónica. El policía celaba demasiado a su hija. En la familia todos temían al policía, y aunque pudieron haberlo denunciado en los organismos competentes por tratarse de una menor de edad, prefirieron callar. La que más temía era Verónica, quien veía en su prometido Nelson Castro la salida a su problema. “Prefiero irme contigo a seguir con mi papá” le dijo una vez a su novio.
Contaba una de las presentes en el funeral que “una vez cuando el padre le descubrió unas cartas de amor, se puso muy bravo, la maltrato y la encerró en un cuarto no sin antes quitarle la ropa para que no saliera mas”.
Fue cuando la madre se llevó a Verónica a casa de su abuela. Pero en una aceptación del noviazgo por parte de Emiro como engaño para tener el pretexto de ir a casa de la abuela de Verónica, y contar con el momento apropiado para matarla en la sala de la casa de dos certeros balazos en el pecho, esto en presencia de su novio.
Según se pudo conocer la madre de Verónica había conversado con los familiares del prometido en busca de ayuda, para intentar hablar con el policía y convencerlo, pero esta reacción materna fue tardía, y lastimosamente no se encauza por los organismos destinados a dar protección a una menor de edad.
PRIMER CRIMEN DE ESTE TIPO EN FALCÓN
En predios policiales se dijo que el caso de filicidio de Verónica, por el problema psicológico producto del enamoramiento del padre con su hija era un caso excepcional, y el primero de ese tipo en la región.
Decían los investigadores que se han visto caso de madres que matan a sus hijos, hijos que matan a sus padres pero padre que mate a su hija por amor, nunca se había visto en el estado Falcón, dijo un funcionario de la PTJ que toma las declaraciones e instrumenta el expediente para pasarlo en los próximos días a los tribunales.
En el retén de la Comandancia General de la Policía, Emiro Gómez, el sargento segundo de la Policía que asesinó a su hija acosado por los celos, ofreció una rueda de prensa para aclarar a la comunidad falconiana los hechos ocurridos, pues para el, la prensa publica “cosas que no son ciertas”.
Esta vez le tocó al periodista Alirio Leal junto al lente de Chourio acudir a la cita en representación del diario La Mañana, donde tendrán la oportunidad de conversar con el autor de uno de los crímenes que ha conmocionado el estado. El periodista describió a Emiro con un semblante tranquilo, y con cara de que no había asesinado a su propia hija con su arma de reglamento.
Entrevista:
Periodista: ¿Porque mató a Verónica?
Emiro: Yo en ningún momento le dispare a Verónica, yo le disparé a el muchacho pero le di fue a ella.
Periodista: Si yo le dijera como periodista que no se manipular un arma me lo creería, pero que lo diga usted con tantos años como policía, y acostumbrado a manejar armas, esa historia nadie se la va a creer.
Emiro: Yo estaba muy nervioso y esa noche me había echado unos palos, por eso le pegue a ella y no a él.
Periodista: Cómo explica usted los dos disparos?
Emiro: Enmudeció ….
Periodista: Que hablaba usted con ellos la noche del suceso?
Emiro: Yo les decía que vamos arreglar los coroto, entonces ellos se echaron a reír, además Verónica no me pidió la bendición esa noche, entonces allí accione mi arma contra él y en medio de mi locura le di a ella.
Periodista: Usted había convivido con ella?
Emiro: Eso es Negativo
Periodista: Y porque la mato?
Emiro: Realmente a mi me molesto cuando encontré a Verónica con ese tipo esa noche en la casa, mi hija María les aviso, estaban solos en la casa y de eso se podía sospechar cualquier cosa, ellos llevaban un año de amores y yo no sabía nada.
La doctora Nilda Rojas Partidas será la Juez que conocerá el caso de filicidio de Verónica Gómez, la menor fue asesinada por su padre, el ex policía Emiro Gómez. En medios tribunalicios se supo que el expediente fue técnicamente cerrado por la PTJ y será instruido al Tribunal I de Primera Instancia en lo Penal.

Cita: “Las familias felices son todas iguales. Cada familia infeliz es infeliz a su manera.” León Tolstói

Toda la Fuente informativa de este reportaje pertenece ÚNICA Y EXCLUSIVAMENTE a la Hemeroteca del Diario La Mañana
Director: Atilio Yanez Plaza
Producción y Redacción: Mario Pialli By Pillo

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